El poder de la voluntad es superior a la voluntad del poder de hacernos perder la voluntad.

La vida en si misma no tiene sentido ni valor ni finalidad, solo nosotros a lo largo de nuestra existencia le brindamos un sentido, le damos un valor y le asignamos una finalidad. Todo lo que nos dicen que debe ser la vida, carece de "valor y sentido"; la vida debe ser lo que elijamos que sea.

viernes, 20 de noviembre de 2009

Debemos cambiar las circunstancias, para cambiar nuestra vida.

Las circunstancias marcan a la vida, como el transcurso de la vida transforma a las circunstancias. Esto es lo que hace que la vida sea inseparable del contexto, las experiencias vividas, la sociedad, la cultura y la situación económica en que se encuentra cada persona.
Cuando nos representamos a alguien como bueno o malo, no podemos separarnos de las circunstancias en que esta esa persona. Por esto robar o matar no puede ser definido como algo malo o bueno indefinidamente o a priori. Pues los actos son inseparables de la situación en que se encuentran las personas que los llevan a cabo, toda acción, pensamiento o discurso esta en relación con las circunstancias. Si mato a alguien no estoy haciendo una mala acción, ni siquiera algo incorrecto. Depende de la situación. ¿Si una mujer mata a un hombre que la violo salvajemente o si una madre asesina al padre de sus hijos al enterarse que este violo durante años a su hija de 11 años, podemos decir que esta mujer es mala? ¿Si alguien no tiene para comer y roba en un mercado una fruta para alimentarse y poder seguir viviendo, este hombre es malo? ¿si me sobra el dinero y uso mi abundancia para simular que soy una persona amable, dando limosnas a los pobres delante de cámaras de televisión para así parecer bondadoso, seria bueno solo por ayudar a los pobres?
Esto solo para mencionar algunas circunstancias, todo se debe juzgar teniendo en cuenta las circunstancias. Aunque pensándolo mejor si cambian las circunstancias no haría falta posiblemente ni siquiera tener leyes. Cambiemos las circunstancias y digamos adiós a la mayoría de los delitos.

Los dogmas como “no mataras” o “no robaras” se traducen en leyes sin-sentido, sin una relación fundada en la compleja realidad, ni conectada con la naturaleza de la condición humana. Estas leyes le dan continuidad y fuerza al grupo que nos domina manejando gran parte de nuestras existencias.

Matar al que te oprime no puede considerarse como una maldad (para alguien “decente”), pero la rebelión entra en oposición con las virtudes cristianas de obediencia, humildad y sumisión. Robar a un millonario tampoco es indecente, ni malo, Pero esta mal hacer eso con “los opuestos a Jesús”, pues la religión dice que no corresponde robar. Se debe dejar al que tiene en abundancia y le sobra para vivir el derecho a que siga viviendo en el lujo y continué con su ostentación. Pues de lo contrario seremos pecadores…..
Pero el cristianismo es un producto de la enajenación e invenciones de las generaciones pasadas, que debido a la estupidez de la mayoría indiferente de las nuevas generaciones y a la voluntad de engañar para obtener ventajas de los poderosos, aun sigue existiendo. ¿Pero a esta religión le corresponde seguir dirigiendo nuestras bases morales y éticas?

¡No te sometas, debemos oponernos a estas reglas entupidas que dirigen y tienen tanta importancia en nuestras sociedades!
El mejor millonario es el que deja de existir, la paz y la justicia se logran eliminando a la injusticia y a los que generan violencia. Basta de alejarnos de las circunstancias reales, seamos decididos y perseverantes en la lucha, la voluntad puede destruir las barreras que construyeron los esclavos del cristianismo. ¡Compañeros de ruta no nos rindamos jamás ante nuestro alicaído enemigo! ¡Pongamos a los excrementos en el retrete y tiremos la cadena para que se vayan y no dejen ni siquiera su olor desagradable!
No queremos ni leyes eternas y dogmáticas, ni iglesias, ni poder del clero, ni más engaños de los parásitos que absorben la vitalidad de las personas. Solo queremos cambiar estas circunstancias para encontrarnos en otra posición, con otras posibilidades, pero para lograr esto….. ¡Hagamos arder a la religión con las llamas de nuestra pasión por la libertad, destruyamos a los opresores de la humanidad¡
Yo tengo una receta que robe de un filosofo loco, usémosla y probemos su sabor…. ¡¡luchemos por la transmutación de valores!! ¡Terminemos de matar a dios!

_si luchar contra los que nos oprimen es un pecado que nos condena al infierno, digamos: el infierno no puede ser peor que ser dominados por los representantes del cielo en la tierra…….

1 comentario:

  1. Iván, Sólo digo algo que no sé si has pensado:
    Con la violencia no se consigue nada

    Un saludo
    Marimar

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